En cualquier momento de nuestra vida podemos necesitar de los servicios de un abogado. Este experto es el encargado de darnos asesoramiento, orientación, así como representar al cliente en diferentes asuntos relacionados con la materia legal.
Es un error pensar que los abogados tan solo se especializan en derecho penal. Sus especializaciones van muy diversas, abarcando desde el derecho tributario, mercantil, civil, corporativo, internacional, entre otros tantos.
Por ejemplo, un abogado laboral es un profesional que se especializa en Derecho del Trabajo, así como en Derecho laboral y otros ámbitos. La legislación laboral, de la misma manera que la legislación tributaria, es considerada como una de las ramas de Derecho más compleja, y esto es debido a los rápidos cambios que se producen en las leyes.
El abogado tiene por objetivo asesorarnos en todo lo que queramos saber sobre leyes, además de iniciar los procedimientos pertinentes, tanto para empresas, cómo para bufetes de abogados.
Un abogado laboral puede ser muy útil en caso de despidos, para tratar casos de desplazamiento geográfico de trabajo, cambio de condiciones laborales, seguridad laboral…
Si estás buscando a un buen abogado en Uruguay, conoce aquí a Raúl Vairo, uno de los mejores de país.
Descubre algunas de las ventajas de contar con un abogado
- Ahorro de tiempo: El abogado se conoce todo lo relacionado con la legislación, por lo que con una simple consulta podremos saber todo lo que necesitamos. Evitará que podamos “Ir a ciegas” en diferentes cuestiones legales, que es el primer punto para caer víctimas de alguna estafa o de un trato poco favorable.
- Garantía: Tendrás la garantía de que siempre cumplirás con la Ley. Muchas veces, sobre todo por su redacción, cumplir con algunas leyes puede ser algo complicado. Si tenemos a un abogado de nuestra parte no habrá nada que temer.
- Seguridad laboral: Con esta figura lograrás aportar una mayor seguridad laboral a tu empresa y a los trabajadores de ellas. Lograremos crear un clima laboral favorable, por lo que todos saldremos beneficiados del mismo. En este caso, tendremos que recurrir a un abogado laboral.
- Proceso judicial: Algunos procesos judiciales requieren de la presencia de un abogado (es decir, que no nos podremos representar nosotros mismos). El abogado te acompañará cuando lo necesites. También puede ejercer en tu nombre en determinados procesos, lo único que habrá que hacer es transferirle los poderes correctamente.
- Protección: Nos puede servir de protección contra las contingencias que se puedan llegar a producir en diferentes ámbitos. por ejemplo, casos de acoso, de discriminación, entre muchos otros.
- Contratos: Puede encargarse de la elaboración de contratos laborales y/o de la terminación de estos documentos. También puede evaluar la legalidad de un contrato, o si bien tiene alguna pega escondida.
Estas son las principales funciones de un abogado, aunque, dependiendo de su especialización, estas pueden ser todavía más variadas. Nuestra recomendación es que busques a aquel abogado que realmente se especialice en el tema que nos ocupa, para conseguir así los mejores resultados en cualquier litigio legal.